Los aficionados aguardan ansiosos noticias sobre el que se había convertido en uno de los festivales más importantes de la primavera andaluza. Colors Tribe, la mayor gira de colores del país, se había asentado en Jaén como ciudad baluarte para celebrar su mayor edición a nivel nacional. La marca, que recorría en los últimos años diferentes puntos de la geografía española, focalizaba sobre la ciudad jiennense su gran propuesta, sin embargo, la pandemia le obligó a iniciar un parón que aún perdura.
La última noticia oficial que hay acerca del festival es su aplazamiento a 2021, algo que fue anunciado en verano de 2020. Evidentemente, las condiciones sanitarias del pasado año impidieron su celebración, sin embargo, el festival no llegó a comunicarse públicamente. Ahora, habiendo superado ya las fechas tradicionales de celebración en un 2022 beneplácito para ello, los aficionados reclaman respuestas y atención por parte de la organización, ya que son muchos los que tienen adquirida su entrada y no han podido recibir el importe de vuelta.
Los malos augurios se han agudizado en fechas recientes, ya que el festival directamente ha desaparecido de redes sociales, algo que ha mosqueado aún más a unos ya insatisfechos y cabreados (con razón) aficionados. Las cuentas oficiales del festival tanto de Facebook como de Instagram han sido eliminadas, y tan sólo queda ‘activa’ su cuenta de twitter, cuya última actividad se registra en 2019. Los aficionados han denunciado públicamente la situación, pero desgraciadamente no encuentran las respuestas que necesitan, simplemente reciben ignorancia y desconocimiento.
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Por nuestra parte, en los últimos meses hemos intentado contactar con los responsables del festival, quienes no parecen querer atender a nadie ni responder a sus obligaciones. La única comunicación que sí hemos podido mantener ha sido a través de uno de los artistas habituales de la marca, quien nos trasladó su desconocimiento acerca de la situación.
No pinta bien el asunto, ya que en España hemos vivido tristemente muchos casos de promotores que han querido quedarse el dinero de los aficionados, así como de estafas de eventos fantasmas inexistentes y cancelados a última hora. En este caso, que la pandemia fuese un duro palo para la escena, organizadores y promotores, no es justificación para quedarse con el dinero de los aficionados. Es una autentica pena que todos aquellos que buenamente pagaron su importe y pusieron toda su ilusión en el evento, se vean ninguneados y desahuciados de esta forma. A todos los niveles merecen legalmente recuperar sus importes si como todo apunta, el festival termina desapareciendo definitivamente.
Ojalá y que los aficionados obtengan respuestas lo antes posible. O incluso en el mejor de los escenarios, que el festival se comunique públicamente anunciando su regreso por todo lo alto para una fecha futura.
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Todo sobre Colors Tribe en este enlace
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